Me gusta usar mi truza morada porque se me embarra; deberías ver lo bien que me veo así, cada que la uso procuro verme el mayor tiempo que pueda al espejo con nada más que ella. Tengo 25 y mido 1.85m, estoy en mi peso ideal y mis musculos se marcan. Tengo suerte ya que no hago nada por mantenerme de esa manera, bebo cerveza y la mayor parte del tiempo lo hago en exceso; hago una comida al día y normalmente en el menú predominan sopes y tortas de quesillo, el único deporte que conozco es el fútbol y lo practico una vez cada dos meses. Aspirar, fumar y cocinar me han dejado un terrible insomnio. ¿Cómo podré conservarme así?
The time, of my life, oh I think you came too soon
¿Cuántos fans hay por ahí que dicen vivir por su música? Han ido a sus conciertos y tienen sus discos, lo han visto crecer y estado con él en altas y bajas; aunque a veces no pueden perdonar que hayan traicionado los ideales que según ellos representan. Seguro que hay muchos así leyendo esto ¿no te parece qué dejas algo de lado?
Oh I was 17, when I heard the countdown start, it started slowly, and I thought it was my heart...
Si no fuera tan huevón subiría el Modern Times de Bob Dylan, el Dylasnesque de Brian Ferry, el Reality y el Heathen de David Bowie y el Other People's Lives de Ray Davies; pero como sí lo soy lo único que me queda es recomendarte lo consigas con tu ciber-pirata de confianza.
Sobre todo subiría el último, Ray Davies tiene 63 y sus letras parecen seguir siendo ignoradas por los conocedores que aman a Conor Oberst quizá porque sus canciones no han sido utilizadas en ninguna película de Sofía Coppola, Alfonso Cuarón o ya siquiera de Zach Braff o quizá porque no hay tiempo para escucharlo ante la oferta de novedades que se nos presenta a diario.
No hay nada nostálgico en escuchar el último disco de un hombre que ha vivido 6 mundiales, ser the next big thing y verse bien en ropa interior no lo es todo en la vida. La juventud está sobrevalorada y cuanto antes nuestra arrogancia nos permita verlo nos irá mejor.
The time, of my life, oh I think you came too soon
¿Cuántos fans hay por ahí que dicen vivir por su música? Han ido a sus conciertos y tienen sus discos, lo han visto crecer y estado con él en altas y bajas; aunque a veces no pueden perdonar que hayan traicionado los ideales que según ellos representan. Seguro que hay muchos así leyendo esto ¿no te parece qué dejas algo de lado?
Oh I was 17, when I heard the countdown start, it started slowly, and I thought it was my heart...
Si no fuera tan huevón subiría el Modern Times de Bob Dylan, el Dylasnesque de Brian Ferry, el Reality y el Heathen de David Bowie y el Other People's Lives de Ray Davies; pero como sí lo soy lo único que me queda es recomendarte lo consigas con tu ciber-pirata de confianza.
Sobre todo subiría el último, Ray Davies tiene 63 y sus letras parecen seguir siendo ignoradas por los conocedores que aman a Conor Oberst quizá porque sus canciones no han sido utilizadas en ninguna película de Sofía Coppola, Alfonso Cuarón o ya siquiera de Zach Braff o quizá porque no hay tiempo para escucharlo ante la oferta de novedades que se nos presenta a diario.
No hay nada nostálgico en escuchar el último disco de un hombre que ha vivido 6 mundiales, ser the next big thing y verse bien en ropa interior no lo es todo en la vida. La juventud está sobrevalorada y cuanto antes nuestra arrogancia nos permita verlo nos irá mejor.
Ni Scarlett Johanson pudo hacer entrar a Dylan en los charts.
4 comentarios: on "Countdown"
Se escribe trusa. Así parece que hablas de una tuza morada que se te embarra, lol...
jaaja, no lo vamos a corregir. ¿Corregir? Quizá sí era lo que quería decir...
Que pena; me disculpo y comenzaré unas planas de mi error.
Quizá no sepan que la buena ortografía en 10:1 se debe a que Sofía jura que si se deja de poner un acento los orgasmos desapareceran de esta la tierra del buen señor y como es una especie de Anabel Ochoa (pero sin dar asco) quiere que todos cojamos a gusto y se encarga de corregir todo texto que llega a sus manos.
Pero ahora que lo menciona anónimo, hace tiempo salí con alguien a quien le decían la Tuza que porque se parecía a la de las películas de Pedro Infante aunque nunca se me embarró.
Ah, pero qué tal suena la voz de Bowie en el Heathen... Le fue bien con ese disco.
Sean buenos chicos y suban el Dylanesque PORFAVOR...
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